Bons (i macos) propòsits

A vegades tafanejes per aquí i per allà i et sorprenen textos tant macos com aquest:

Propòsits (El Periódico, 11 de Gener de 2007)

Planchar el pañuelo de forma que el cuadrado resulte perfecto. Bautizar con un nombre de mujer cada planta de la casa. Regar las flores pétalo a pétalo y con diferentes aguas (los claveles, con agua de rosas: las artificiales con agua de colónia). Firmar hipotecas con pintalabios. Buscarnos a nosotros mismos en las rebajas. Mezclar hielo y fuego sin que uno constipe o queme al otro y hasta que, finalmente, surga una cosa tíbia. Hacer hielitos con lágrimas. No acudir ninguno de los dos a la cita convenida. Explicar cosas complejas y que todos las comprendan a la perfección. En una cena multitudinaria que la suma de la aportación de cada comensal coincida con el importe de la nota, y encima, quede algo de propina. Escribir un hijo, plantar un libro, parir un arbol. Esperar trenes y dejarlos partir. Sonreir mientras pelamos cebollas. Nacer el próximo 29 de Febrero y morir viejo a los veintitantos. Matar en la primera estocada. Conseguir strike en la pista de bolos, diana en los dardos y cum laude en una tesis. Jugar a los dados con balas. Al abrir una ostra encontrarnos una seta y dar gracias a Dios por sus faltas de ortografia. Conseguir en casa el gintónic perfecto, como el de un bar lleno de gente. Enviar participaciones de divorcio. Enhebrar una aguja de coser con los ojos cerrados. Dibujar filas indias con tinta china en una alfombra persa. Pedir la luna en un cesto. Quemar abanicos en invierno, cantar villancicos en la playa. Ver visiones. Hacer el amor y querer el hacer. Que el brindis rompa las copas y mezclar la sangre de las heridas. Inventar un nuevo tiempo verbal: el presente perfecto. Que el tóner de la impresora se acabe en la redondez de este punto final.